Crónica Alevín 2003 «A» vs Espacio Torrelodones Negro
ALEVIN 2.003 A
ESPACIO TORRELODONES NEGRO 79 – ALCORCÓN BASKET “A” 74
Segundo partido de esta fase, ante uno de los rivales a priori más potentes del grupo junto con Coslada y entre los candidatos a medalla. Por tanto, se presumía un encuentro muy complicado, que, para condicionar aun más el desarrollo de nuestro juego, se disputó en un pabellón en obras que dejaba disfrutar en su plenitud del sano ambiente serrano y en un campo donde las líneas de fondo coincidían o bien con espalderas o bien directamente con la pared. En todo caso, son circunstancias que afectan por igual a ambos equipos y ya son muchos partidos los que se han celebrado en ese campo, por lo que no cabe sino jugar y confiar en que la fogosidad de algún chico no le juegue una mala pasada.
El guión del partido se desarrolló según lo previsto, con la agradable sorpresa de que nuestros chicos se aclimataron con enorme rapidez a las características de un campo tan pequeño, con las ideas claras en defensa y mirando aro sin complejos, para cerrar el primer sexto con una mínima ventaja en el marcador (14-15). En el segundo periodo nos dejamos llevar a una dinámica en ataque que no nos convenía, cuál era el lanzamiento recurrente de triples cuando todavía no habíamos calibrado el punto de mira a una distancia más corta de la habitual, pero la calidad de nuestros chicos permitió mantenernos en el partido (32-27), para llegar a un tercer sexto donde, apretando en defensa y con criterio y rapidez en ataque, hicimos encajar al equipo torresano un parcial de 6-17, que nos p
ermitía ir al descanso 6 puntos arriba.
La reanudación del partido fue un cúmulo de desaciertos por ambas partes que se prolongó durante todo el sexto y que provocó un tiempo muerto visitante, muy útil, pues tras el mismo anotamos un triple que, aunque parezca escaso rédito, nos permitió seguir conservando la ventaja adquirida. En el quinto periodo, ambos equipos volvieron al nivel anotador anterior en un sexto tan igualado como el previo y que dejó el tanteador en 57-63 a falta de los últimos ocho minutos.
Y así comenzó el sexto definitivo, con intercambios de canastas, hasta que, mediado el periodo…… Hacer una crítica de esos últimos cuatro minutos no sería constructivo ni, sobre todo, sería justo con el esfuerzo y acierto mostrados en los 44 minutos anteriores. No supimos leer ese tramo final y, con técnica al banquillo incluida, acabamos recibiendo, por añadidura, una canasta in extremis. En todo caso, en un análisis frio, el nivel que está alcanzando el equipo era inimaginable hace no mucho tiempo, como lo hubiese sido aún más pensar que podríamos estar disgustados por perder con Torrelodones a domicilio y por 5 puntos.
Conclusiones: una, obvia, los partidos duran 48 minutos y tienen seis periodos completos; otra, igual de importante, las derrotas hay que saber gestionarlas, y, en este caso, chapeau para el cuerpo técnico, que supo motivar tanto a los chicos como a los padres para hacer piña e ilusionarnos ante el siguiente reto.